El chocolate como alimento indispensable

El chocolate es originario de la zona del Orinoco y Amazonas en la parte norte de América del Sur, y los mayas y aztecas ya apreciaban sus múltiples bondades. La tradición dice que el dios Quetzalcóatl (la serpiente alada) decidió robar el árbol del cacao del paraíso para entregárselo a los hombres, para que se alimentaran y fueran fuertes y sabios. Dudamos de que lo que nos aporte el chocolate sea sabiduría, pero sí sabemos a ciencia cierta que nos aporta un sinfín de beneficios.

Afortunadamente Hernán Cortés decidió traerlo a nuestras tierras y aunque a Carlos V no le resultó un producto especialmente interesante ni sabroso, fue conquistando siglo a siglo los paladares nobles y luego fue haciéndose cada vez más popular, tanto que hasta hoy seguimos disfrutando del “alimento de los dioses”.

Chocolate “sin culpas”

Por si necesitáramos alguna excusa para consumirlo, el chocolate puro tiene muchísimas propiedades que lo convierten en un indispensable en tu dieta. Es que tiene multitud de minerales: magnesio, hierro, fósforo, calcio y potasio, a los que se suman los ácidos grasos omega 9, y también un alto contenido en flavonoides que ayudan a regular la presión arterial, son antioxidantes y neuroprotectores, es decir que mejoran la memoria y la capacidad de concentración y aprendizaje.

Mejora la resistencia a la insulina (hormona que controla los niveles del azúcar en sangre) y optimizan el metabolismo de la glucosa en las personas diabéticas.

Cuanto más puro se consuma, mejor para tu salud, ya que contendrá menores niveles de grasa y azúcar.

Ahora…no te pases, ya que todos (o casi todos) los alimentos son sanos en su justa medida. Debes hacer un consumo ocasional y moderado, porque aunque aporta gran cantidad de energía, también tiene grasas y azúcares, así que incorpóralo a una dieta variada y será un complemento ideal.

El chocolate nos hace felices

Que el chocolate nos hace felices, ya lo sabíamos, pero los motivos de que esto suceda son químicos.

Esos agentes que se liberan en tu cerebro cuando comemos chocolate son el triptófano (una sustancia que produce la liberación de serotonina, un neurotransmisor asociado con la felicidad), la feniletilamina otro neurotransmisor que estimula el sistema nervioso (se asocia con la felicidad producida durante la etapa de enamoramiento entre 2 personas) y la teobromina, que tiene un efecto relajante que genera bienestar, y podría considerarse como un anti-depresivo ligero.

También se liberan endorfinas, asociadas con sentimientos de bienestar y felicidad, que a su vez reducen la sensación de estrés.

Y si no te bastaba con todos los beneficios que te contamos, además, “se te nota en la cara”: el chocolate mejora la elasticidad de la piel, su hidratación y su densidad.

Así que, celebra el día del chocolate y…date un gusto…

Congelados Dil. Congelados Selectos desde 1967 (Castellón - Valencia).