¿Cuál es la diferencia entre fecha de caducidad y consumo preferente?

Fecha de caducidad

Es la fecha máxima en la que podrías consumir un producto perecedero antes de que comiencen a aparecer agentes patógenos, es decir, microorganismos que podrían provocarte enfermedades.

Cuando hablamos de productos perecederos nos referimos a carne, pollo, pescado o queso fresco. Estos productos corren el riesgo de haber comenzado un proceso de descomposición, tanto si se supera la fecha de caducidad como si se ha roto la cadena de refrigeración en la producción y transporte.

Por supuesto ya sabes que con los productos de Congelados Dil puedes estar perfectamente tranquilo/a ya que contamos con vehículos frigoríficos (isotérmicos) y almacenes frigoríficos diseñados especialmente para mantener la cadena de frío y poner en tus manos un producto de calidad garantizada.

Consumo preferente

Es la fecha de consumo indicada en los envases de los productos no perecederos como: yogures, quesos curados, mantequilla, embutidos, pan de molde, galletas y bollería, patatas fritas y frutos secos, refrescos y alcohol, arroz, pasta y legumbres, mermeladas, sopas y salsa de sobre o envases de tomate.

A partir de esa fecha, si los alimentos han estado cerrados y se ven en buen estado (buena apariencia y color), podrían consumirse sin riesgo para tu salud, eso sí, teniendo en cuenta que podrían haber modificado su aroma, sabor o textura.

Ante todo, sentido común: si ves cualquier signo sospechoso en los alimentos, ante la duda, deséchalos ya que no tienes garantía de que estén en óptimas condiciones.

Desperdicio de alimentos en España

Nuestro país, según un informe de la Asociación de Fabricantes y Consumidores, desecha alrededor de 1.300.000 toneladas de alimentos al año.

También se señala que existe confusión entre los conceptos fecha de caducidad y consumo preferente, y que quienes más desperdician son los jóvenes entre 25 y 34 años. En la mayoría de los casos este desperdicio es por mala planificación de sus menús semanales (algo en lo que nosotros insistimos desde nuestro blog muy a menudo) y por desconocimiento de recetas de aprovechamiento de alimentos.

Según estudios de la ONU, la mayor parte de la pérdida de alimentos en países industrializados se produce en los hogares, llegando a alcanzar cifras del 42%. Este desperdicio tiene un coste altísimo para el planeta, ya que no se trata de estar desechando unas peras en mal estado o los restos de algún precocinado en su envase plástico o de aluminio, sino que detrás de ellos existen unos productores, agrícolas o ganaderos, y una cadena industrial de elaboración y transporte que ha invertido muchos recursos y emitido CO2 para producir ese alimento.

Algunos consejos sobre consumo

Si te hicieran una encuesta sobre este tema, ¿qué responderías?¿En tu casa se tiran alimentos a la basura? Normalmente todos tendemos a decir que no, pero las cifras nos ponen en evidencia.

Así que ya sabes, la mejor manera de evitar el desperdicio es la organización. Si planeas las comidas de la semana antes de hacer la compra y encargarnos nuestros productos, no fallarás. Además, puedes tomar medidas como la congelación por raciones, de esta forma, cuando descongeles solo será en función de los comensales y no tendrás sobras.

Tampoco acumularás alimentos que puedan descomponerse y así no te verás en el caso de tener que tirarlos a la basura porque resulten poco seguros.

Congelados Dil. Congelados Selectos desde 1967 (Castellón- Valencia).